Domótica es una palabra bastante usada pero a veces es difícil establecer si algo es o no domótico.

Para empezar una residencia no es una vivienda, aunque parecerse a ella suele ser uno de los objetivos. Domótica es automatización del hogar (domus) y por tanto en una residencia sería más correcto hablar de automatizar un inmueble, es decir inmótica.

Una diferencia importante entre automatizar un hogar y una residencia es que en la residencia hay una dirección responsable de velar por el buen uso tanto de elementos comunes como privativos.

Más allá de estos matices, si queremos evaluar si nuestro sistema de llamada asistencial realiza también funciones domóticas habrá que preguntarse:

• ¿Se pueden controlar luces de una manera alternativa al interruptor de la pared?. Por ejemplo desde el móvil.
• ¿Se puede hacer lo mismo con persianas u otros motores?
• ¿Se pueden usar enchufes inteligentes desde el sistema?
• ¿Es controlable algún dispositivo de climatización de forma centralizada?
• ¿Permite el sistema generar llamadas asistenciales desde mandos inalámbricos, o móviles, o asistentes de voz?
• ¿Se pueden utilizar cámaras IP?

¿Por qué es interesante que el sistema de llamada asistencial realice también funciones domóticas?

Conforme más dispositivos tenemos integrados en un mismo sistema más se multiplican las posibilidades. Por ejemplo, si detectamos que alguien se levanta de la cama por la noche sería oportuno encender una luz del baño para reducir el riesgo de caída. O si hay un consumo no habitual en un enchufe podríamos enviar un mensaje de alerta a los asistentes. O si cierta ventana está abierta se puede alertar y al tiempo detener el aire acondicionado. Etc.

Desde el origen de SAID allá por 2007, se consideró que controlar dispositivos como luces, persianas, etc, era una posibilidad tan útil como controlar indicadores luminosos o acústicos. Por tanto, ¿por qué limitar o cerrar posibilidades?

También se tuvo claro que las funciones domóticas o de control exigen una inmediatez y fiabilidad que no era demasiado compatible con la nube, de manera que la figura de un servidor local adquirió todavía más importancia.

Si crees que cada vez más los residentes demandarán funciones domóticas y que es necesario un control adecuado de las mismas por parte de los responsables de la residencia, SAID puede ser útil.